La Asamblea General de Naciones Unidas designó el 1 de Octubre Día Internacional de las Persona Mayores en 1990. La condición de «Persona Mayor» es aceptada para aquellas personas de más de 65 años.
Históricamente, hasta el siglo XIX, llegar a esa edad era un privilegio, ya que la esperanza de vida no superaba los 40 ó 50 años. Actualmente la población mundial de más de 65 años crece rápidamente, más incluso que el crecimiento demográfico general de la población.
Este incremento se debe a la mejora general de la calidad de vida, alimentación, avances médicos, etc. Esta situación trae como consecuencia la necesidad de emprender una serie de acciones en favor de las personas mayores, para que el mayor tiempo de vida sea también vivido con calidad de vida, por lo que hay que tener en cuenta aspectos como: afecto, cercanía, ocupación, función social, reconocimiento.
Evidentemente en la sociedad actual existe una industria comercial que privilegia a los/as mayores como clientes y consumidores. Hay cierta tendencia de la administración pública a colaborar con esta situación. Toca a las organizaciones de mayores reivindicar su voz y su papel en la sociedad. Ojalá que las organizaciones de voluntariado que apoyan a los mayores apoyen también sus reinvindicaciones
Históricamente, hasta el siglo XIX, llegar a esa edad era un privilegio, ya que la esperanza de vida no superaba los 40 ó 50 años. Actualmente la población mundial de más de 65 años crece rápidamente, más incluso que el crecimiento demográfico general de la población.
Este incremento se debe a la mejora general de la calidad de vida, alimentación, avances médicos, etc. Esta situación trae como consecuencia la necesidad de emprender una serie de acciones en favor de las personas mayores, para que el mayor tiempo de vida sea también vivido con calidad de vida, por lo que hay que tener en cuenta aspectos como: afecto, cercanía, ocupación, función social, reconocimiento.
Evidentemente en la sociedad actual existe una industria comercial que privilegia a los/as mayores como clientes y consumidores. Hay cierta tendencia de la administración pública a colaborar con esta situación. Toca a las organizaciones de mayores reivindicar su voz y su papel en la sociedad. Ojalá que las organizaciones de voluntariado que apoyan a los mayores apoyen también sus reinvindicaciones
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